El costurero ya ha sido terminado, después de montarlo se le dió unas últimas capas de gomalaca y nos lo pudimos llevar a casa. Ya está listo para meter hilos, agujas y todo lo necesario para la costura. En las tres imágenes de arriba podemos ver en que estado estaba el costurero cuando se encontró y en las siguientes tal y como ha quedado después de haber sido restaurado.
No parece el mismo, te ha quedado estupendo! Me encanta la tela de dentro. Buen trabajo!
ResponderEliminarTe sigo, aunque es la primera vez que comento
Hola Isabel, muchas gracias, la verdad es que estoy muy contenta con el resultado y te agradezco que te hayas animado a comentar, espero verte más por aquí.
ResponderEliminarSaludos